PRESENTACIÓN DE LIBRO: POR AQUÍ ANDAN MIS ÁNGELES AÑO 2008

PRESENTACIÓN DE LIBRO: POR AQUÍ ANDAN MIS ÁNGELES AÑO 2008

A MANERA DE PRÓLOGO. ALBERTO ROCASOLANO

Sin renunciar totalmente a la anécdota, la poeta nos presenta un libro de rico nivel tropológico. Y este solo rasgo, constituye una acentuación hacia el lirismo. La poesía, como arte al fin, implica transfiguración, puesto que –muévase de los objetivo a lo subjetivo o viceversa- siempre resulta múltiple, como los caminos para llegar a ella o para que ella venga a nosotros.

Poesía que sin desdeñar el plano ontológico, o sea, la búsqueda del ser, halla definición al inclinarse la balanza a favor del plano óntico, en el cual la naturaleza y las sensaciones inciden como esenciales impulsos. Estamos en presencia de un lenguaje signado por un acercamiento a las acciones y las cosas de tangencial o alusivo desplazamiento.

Ante la imprecisión temática que caracteriza a la poesía actual, es decir, donde en un mismo poema se entrecruzan las más diversas alusiones y sensaciones, el lenguaje indirecto que caracteriza a este poemario, es por sí solo un valor primordial.

He aquí, como ejemplo, algunos versos felices: ―Escucho el galope del aire que viene a socorrerme/ cuando mis pulmones están a punto de la asfixia y el sopor prepara sus mortajas…/ ―Y otros quedarían/ en la escarcha que derrama el olvido.‖//Desaparezco. Luego me reinvento/ en este laberinto de palabras que huyen…/ ―Yo que no puedo ver a través de la ausencia/ donde vengo a ocultarme cada día…/Desfilan en el tiempo los rostros angustiados,/ las sonrisas eternas del momento feliz./ ―…plantando sus semillas/ en los sentidos del futuro con su carga imprecisa…/ ―No saben que la piel del poema nunca puede arrugarse./Estornudo al respirar el polvo del silencio./ ―La ira de los dioses confundió nuestras lenguas/ cuando casi tocábamos en las puerta del cielo… / Nadie debe inquietarse, / la aspiración es animal que se alimenta de sus logros.

No se trata de la yuxtaposición de imágenes y metáforas, sino de una ascensión en espiral que partiendo de un centro generador se acerca al mundo con el fin de fijar sensaciones o impresiones.

¿Puede existir una poesía –que es creación- que centre únicamente su causa en el paso de las cosas del no ser al ser que dijera Platón en el Banquete, o contrariamente, son las cosas reales y objetivas las que al pasar por la subjetividad se transfiguran y dan lugar a una tercera realidad?

Estamos, pues, ante un quehacer poético que sin proponerse una metafísica de la vida, asume esta última bordeando un espacio que no se aleja demasiado del sentir cotidiano (léase, por ejemplo, ―Apego a las raíces), valiéndose para ello, fundamentalmente, del verso libre, pero sin renunciar a las formas tradicionales.

Sin caer en sentimentalismos extemporáneos, la atmósfera general de este poemario mantiene la suficiente y humana calidez de la cual no puede prescindir toda buena poesía.

Alberto Rocasolano Ensayista, poeta, novelista cubano. 08-07-2007